La gente suele decir eso de "anda que vas a escribir tú" "¿Quién te leerá?". La verdad es que habrá gente mejor que yo, eso no lo niego pero por que no hacer una locura, por que no convertir mi fantasía en algo real, y es por eso que puedo ser una más o ser esa más que triunfa...

viernes, 21 de febrero de 2014

Sin Sentido---> Capítulo 2


Abrí los ojos, todo estaba muy oscuro, tan oscuro que no se podía distinguir nada. Intenté incorporarme, pero mi cuerpo no me dejaba, tenia un gran peso encima. Lo volví ha intentar otra vez, pero fue en vano. ¿Qué me pasa?- pensé algo asustado. No había ningún sonido a mi alrededor, demasiado tranquilo. Intenté recordar algo, lo que fuera, pero mi mente no me dejaba, era como si hubiera creado una barrera que fuera inquebrantable. Respiré profundamente, pero no produje ningún sonido, nada. Esto tiene que ser una broma... ¿Estaré muerto?- sin poder evitarlo las palabras resonaron en mi cabeza. Imposible ¿Cómo voy ha estar muerto?- una sonrisa apareció en mi cara al pensar en esa estúpida idea, me quería convencer a mi mismo. De repente la escuche, como un susurro. Su voz era tan suave que te tranquilizaba pero a la misma vez te hacía que te llenaras de vida, sin duda tenía que ser ella. Cerré los ojos intentando concentrarme en su voz, pero sin previo aviso su voz se apagó. Abrí de nuevo mis ojos, teniendo las esperanza de que todo fuera un sueño, pero de nuevo me encontré sumergido en la oscuridad. Bueno parece que esteré una temporada con bastante tiempo libre- me sorprendí a mi mismo que pudiera bromear y mantener la calma en esta situación. No sabía cuanto tiempo me había quedado dormido, me era muy difícil saber cuanto tiempo había pasado. Tenía miedo de abrir de nuevo los ojos y encontrarme con esa fría e inmensa oscuridad. Respiré para tranquilizarme, y abrí poco a poco los ojos, teniendo la esperanza de despertarme en mi habitación junto a Hela. Me encontré con una habitación muy iluminada, tanto que me hacía daño en los ojos. Mis músculos y mi respiración se relajaron. Miré como pude alrededor de la habitación, la cual no me era nada familiar. Había una gran ventana, en la que se podía ver grandes edificios y pájaros revoloteando cerca de un árbol. Las paredes eran de color melocotón claro, lo que me producía una sensación de tranquilidad. Cerca de un pequeño armario había una mesa con un jarrón de flores encima. Parece que todo al final si ha sido un sueño... Espero para la próxima soñar con algo menos aterrador y agobiante- Pensé mientras miraba por la ventana. Miré hacia mis brazos y encontré un sin fin de cables puestos en todo mi cuerpo y conectados a varios monitores y aparatos. No se si fue por el pánico o por el agobio pero me incorporé y empece a quitarme uno por uno de esos cables, haciendo que los aparatos emitieran un sonido bastante molesto. Me senté y puse primero uno de los pies, agarrando me a las sábanas para no perder el equilibrio, después el otro. Noté como el frío del suelo recorría las plantas de mis pies . Me solté de las sábanas y di un paso bastante firme, o al menos eso fue lo que pensé. Me caí en redondo al suelo, sin poder evitar darme un golpe en la espalda y cabeza. Me quedé tumbado en el suelo, sin hacer nada, sintiendo ahora el frió por todo mi cuerpo. La puerta se abrió de par en par y vi a una mujer con un uniforme de color azul entrando en la habitación y poniendo se al lado de la cama. Me sorprendió que no se hubiera percatado que yo estaba allí a su lado, tirado en el suelo. El sonido aún no había cesado, dando me aún más dolor de cabeza. Me incorporé y me quedé mirando fijamente lo que hacía esa mujer con los cables. Parece que ha sido una falsa alarma- su voz sonaba algo cansada. El molesto ruido dejó de sonar, lo que me hizo poder de nuevo escuchar mis pensamientos. Perdona podrías ayudarme, es que hoy me he levantado un tanto patoso- le dije mientras me incorporaba. La mujer miro donde yo estaba y giró la cabeza para contemplar la ventana. Esto... Perdona el suelo está algo frío así que...- la mujer seguía mirando la ventana. Espera a lo mejor es sorda ¿Pero entonce, qué hago?- pensé mientras mi cuerpo empezaba a tiritar. ¡Hola, podrías ayudar me estoy aquí, en el suelo, al lado de la cama!- ya no podía chillar más. La mujer se giro de nuevo y miró hacia la cama. Pobrecillo con lo joven que es- su cara reflejaba tristeza. La mujer comenzó ha andar y la seguí con la mirada esperando que se acercara para ayudarme. Me quedé perplejo al ver la salir de la habitación, dejando me allí tirado en el suelo. No, deja lo que seguro que yo puedo solo, pedía ayuda por molestar, nada más- dije hablando le al aire. Me agarre a la cama como puede y me puse de rodillas. Estire el brazo encima de la cama, haciendo me rozar con algo cálido. Levanté poco a poco la cabeza esperando que el mareo no me hiciera caer me de nuevo. Lo que vi en ese momento no lo olvidaré jamás. Mi cuerpo empezó a temblar del miedo, y en mi cabeza sonaba una y otra vez la frase “No puede ser”. Era tan irreal, esto solo se podía ver en películas o leer en libros, pero nunca podría pasar en la vida real. Como era posible que yo, el que estaba allí, en el suelo, estuviera a la misma vez tumbado en la cama con los mismos cables que hacía solo unos minutos me había quitado. Parece que la pesadilla aún no ha acabado- Dije mientras cerraba mis ojos.



2 comentarios:

  1. Está interesante y engancha, me está gustando mucho, peeeero (aquí viene la crítica constructiva) si pusieras más puntos y aparte sería más fácil de leer. Y vigila las faltas de ortografía!!!

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